Las autoridades laborales dejaron en claro que los trabajadores deben retomar hoy sus tareas, aunque tienen un plazo de 72 horas hábiles para el cumplimiento. Sin embargo, los delegados del Casino flotante de Puerto Madero indicaron que recién lo harán el miércoles próximo. A su vez, el Ministerio retrotrajo la situación de los 93 despedidos, quienes deberán presentarse en la casa de juegos el próximo 12 de diciembre.
El conflicto podría seguir su curso debido a que los seis gremios que representan al personal del Casino se distanciaron de los trabajadores echados por los incidentes ocurridos a comienzos de noviembre, al considerar que “atentan contra la seguridad laboral”.
De todos modos, a partir de hoy, Trabajo ordenó una conciliación por 15 días hábiles que implica que los trabajadores deben presentarse a cumplir tareas y no bloquear las puertas, y que la empresa no puede despedir.
Por su parte, los delegados precisaron que recién el miércoles a las 6 hs. “se presentarán todos los empleados del casino y primero entrarán los despedidos” y advirtieron que si la empresa “no cumple con la disposición oficial habrá más medidas de fuerza”.
El Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar (Aleara) y el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) firmaron un acta en la cartera para afirmar que “no corresponde la aplicación de una conciliación obligatoria” y solicitar “la no presencia de violentos en el ámbito de trabajo”, según dice el documento. SOMU y Aleara, cuyos afiliados fueron protagonistas de esos enfrentamientos, junto con los gremios de gastronómicos, Capitanes de Ultramar, electricistas y de maquinistas “dejaron en claro que no querían la reincorporación de los primeros 73 despedidos por considerarlos violentos”.
“Sucede que atentan contra la seguridad laboral, la justicia debe decidir por su situación”, añadieron las mismas fuentes, al terminar la negociación en el ministerio de Trabajo, la que fue convocada ayer por su titular, Carlos Tomada.
El encuentro fue encabezado por el jefe de gabinete del ministerio, Norberto Ciaravino, quien convocó al término de la reunión a los delegados de los trabajadores despedidos, algunos de ellos distanciados de sus gremios.
La empresa concesionaria del casino mantuvo hoy su posición respecto a los despedidos, al considerar que fueron cesanteados “en forma cauta, prudente, con justa causa y pruebas”, dijo el gerente de Recursos Humanos de la empresa, Gustavo Ratti.Ratti participó del encuentro junto a Mario Antelo y Diego Lorenzo, representantes de la empresa, quienes “ratificaron su decisión de no reincorporar a los trabajadores despedidos, única vía para garantizar la paz social”, dice el acta.
Fuentes oficiales aseguraron que la compañía aceptó el pedido de Tomada para “cesar con los despidos”, los cuales fueron “73 por los incidentes del 9 de noviembre y 20 por ausencia a los puestos de trabajo”.
Fassione justificó el distanciamiento de los gremios de sus afiliados despedidos “por una cuestión de seguridad, los que van reciben presiones, los sindicatos piden que se garantice la fuente de trabajo de los más de mil empleados del lugar”.
Un grupo de empleados despedidos junto con partidos y grupos políticos de izquierda se manifestó frente a la cartera, en tanto mantenía el bloqueo al predio del casino en Dársena Sur.
El conflicto en el casino comenzó el 9 de noviembre cuando afiliados de Aleara y de SOMU se enfrentaron por una disputa por el encuadramiento gremial del personal en el interior de uno de los buques, lo que promovió los despidos.
Fuente: InfoBAE.com (Argentina)
Fuente: InfoBAE.com (Argentina)
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