martes, 25 de diciembre de 2007

Trabajadores del Casino flotante pasaron la Nochebuena encadenados a la Pirámide de Mayo

Argentina - Trabajadores del Casino flotante de Puerto Madero recibieron la Navidad encadenados a la Pirámide de Mayo, en reclamo por la reincorporación de los más de 90 empleados despedidos de esa sala de juegos.
Tras pasar la noche frente a la Casa de Gobierno, el delegado Sebastián Dinzelbacher aseguró que los encadenados, que fueron acompañados por un centenar de compañeros, 'planean pasar allí la Navidad, y si es necesario recibir así el Año Nuevo'.
Durante la noche, además del pedido por la reincorporación, los trabajadores reiteraron su reclamo por una audiencia con la presidenta Cristina Kirchner, a fin de solicitarle que intervenga en el conflicto gremial.
'Fue una noche dura, porque todos queríamos estar en nuestras casas. Pero gracias a la gente que nos acercó comida y nos acompañó se hizo más llevadero', aseguró Martín, uno de los trabajadores del Casino flotante.
Se quejó por la falta de respuesta oficial y afirmó que las negociaciones llevadas adelante en el marco del Ministerio de Trabajo fueron 'una pérdida de tiempo'.
"Esperemos que la situación se revierta, hasta ahora todos los esfuerzos de negociación fueron una pérdida de tiempo", remarcó el trabajador en declaraciones a un canal de noticias por cable.
En ese sentido, reclamó que el 'Ministerio de Trabajo cumpla con sus funciones y logre entablar un canal de diálogo con la empresa Casino Buenos Aires'.
Los empleados de la sala de juegos pasaron la noche de Navidad frente a la Casa Rosada, donde se mantiene el campamento desde el jueves pasado.
'Se trata de un plan orquestado desde la empresa para sacarse de encima a la gente que lo molesta. Llegamos hasta acá reclamando lo justo, porque salimos a reclamar por salud y terminamos festejando la Navidad en Plaza de Mayo', expresó otro manifestante.
La protesta de los trabajadores se desarrolla en medio de una grave interna gremial entre los delegados, que reclaman la reincorporación de los despedidos, y las conducciones de los seis sindicatos que representan a los obreros del Casino.
El Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria, pero la sala de juegos permanece cerrada por orden de la jueza María Servini de Cubría, quien tomó esa decisión tras los violentos incidentes que se produjeron durante una asamblea de delegados.
Fuente: cadena3

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