La crisis amenaza 700 empleos en hoteles de lujo de Málaga

España - Los establecimientos de cinco estrellas sufren el desvío de la demanda a hoteles de menor categoría y la bajada del turismo del golf • Hoteles emblemáticos como el Byblos o el Incosol pagan con recortes de personal las operaciones realizadas en la época del boom inmobiliario.
La crisis económica ha propiciado, por diversos motivos, que más de 700 trabajadores de hoteles de cinco estrellas de la Costa del Sol no tengan nada claro el futuro de sus empleos. La mayoría pertenecen al hotel Byblos, al Incosol y al Torrequebrada, aunque la lista se ha ampliado en los últimos días a los Guadalpín Marbella y Banús, que ayer mismo fueron denunciados ante la Inspección de Trabajo por el sindicato Comisiones Obras por haber despedido a 18 personas -más del 10% de la plantilla- sin haber presentado el preceptivo Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
Más allá de las cifras, la situación de estos establecimientos -muchos de ellos emblemas turísticos para el cliente extranjero- resulta llamativa y sólo se explica, según apunta el sindicato, por un cúmulo de circunstancias.
Por un lado, el incremento de hoteles de cinco estrellas en Málaga en los últimos años ha repartido mucho más una clientela selecta y que, en épocas de crisis con la actual, suele desviarse a hoteles de categoría inferior. Baste recordar que en los últimos años, los cinco estrellas que eran coto casi exclusivo de Marbella prácticamente se han duplicado, sumando actualmente 21 en la provincia (13 cinco estrellas y 8 cinco estrellas gran lujo), con un total de superior a las 6.800 plazas, según los últimos datos del Patronato de Turismo de la Costa del Sol.
"Es una época de complicada, donde segmentos como el turismo de golf, uno de los grandes usuarios de estos establecimientos, ha recortado sus visitas. Por eso, los, cinco estrellas son los que más han visto recortados sus beneficios", señala Lola Villalba, secretaria de Hostelería, Turismo y Comercio de CCOO.
Por otra parte, los hoteles más afectados en su viabilidad son los que han cambiado de propietario en los últimos años, con unas operaciones realizadas al amparo de una bonanza económica ya extinta, y con una fuerte presencia del negocio inmobiliario. El caso más flagrante es el del hotel Incosol, adquirido en 2007 por la cadena de construcción gaditana Jale Monasterio, que actualmente está acogida a la Ley Concursal para resolver sus deudas con los acreedores.
Los cerca de 200 trabajadores del Incosol siguen yendo a trabajar todos los días y cobran sin mayores problemas, aunque todo está pendiente de la decisión que tome en un futuro el juzgado de Cádiz que lleva el proceso concursal. Los sindicatos cruzan los dedos para que el Incosol se incluya dentro de los activos en venta, y que pueda ser adquirido así por otro grupo empresarial que le dé un nuevo impulso y aproveche su prestigio como establecimiento especialista en salud y talasoterapia.
El papel de Aifos. Una historia parecida es del hotel Byblos y los Guadalpín Marbella y Banús, que entre todos suman más de 400 empleos y que son propiedad de la promotora inmobiliaria Aifos.
La empresa salió muy tocada de la operación ´Malaya´, con parte de su cúpula implicada, y la dirección tiene presentado un ERE en el Byblos que afecta a 42 de los 150 trabajadores, y que ha sido rechazado por el comité de empresa. Además, el hotel será sacado a subasta pública enero de 2009 debido a las deudas que Aifos mantiene con el Ayuntamiento de Mijas. También en este caso, la solución es que algún grupo hotelero puje y presente un plan de viabilidad.
En el caso de los ´guadalpines´, Villalba afirma que existe "un miedo terrible y falta de información sobre los contratos y horas extras",, y tampoco informa sobre cuántos trabajadores fijos y fijos-discontinuos hay actualmente.
Imagen de la Costa. La situación de precariedad la completa el hotel Torrequebrada de Benalmádena, adquirido hace unos años por el magnate árabe Mohamed Sharif por unos 40 millones de euros y que, a día de hoy, según confirman fuentes del sector, está en proceso de venta y con alguna oferta bastante avanzada. El establecimiento, con unos 160 trabajadores, tampoco vive sus mejores tiempos desde que fuera separado empresarialmente del Casino, del que en buena parte procedía su clientela. Y volviendo a Marbella, los sindicatos también hablan de problemas puntuales de cobro en Los Monteros.
Desde CCOO, se comenta la necesidad de que todos estos hoteles resuelvan sus problemas, para mantener la fortaleza de la Costa del Sol como destino turístico, aunque no dudan en criticar los golpes que vienen sufriendo la imagen del litoral malagueño, tanto por los casos de corrupción turística como por lo masificado de su turismo y por la carecía de infraestructuras de transporte.
"Necesitamos atar al turismo de calidad, pero eso sólo lo haremos con carreteras que eviten los atascos y con más zonas verde", apunta Villalba. También solicitan a las administraciones ayudas en la línea del Plan Qualifica, pero más numerosas, para acometer la reforma de los establecimientos cuyas instalaciones se hayan quedado más obsoletas.
Fuente: laopiniondemalaga