miércoles, 29 de octubre de 2008

Lotería: Objeciones a ex interventor, intereses de empresas, irregularidades y dudas

Argentina - El auditor general del Poder Judicial de Río Negro, Gustavo Martínez, ratificó hoy ante los jueces de la Cámara en lo Criminal de Viedma sus reparos a las decisiones del ex interventor de la Lotería de Río Negro, Miguel Irigoyen, respecto de las concesiones del casino manejado por el grupo VARSA-Casinos Río Negro, de Carlos Ferrari, quien está acusado de ofrecer dádivas al ex funcionario del organismo que controla los juegos de azar.
Pero, Martínez introdujo –durante un tramo de la prolongada declaración- una inquietante cuestión vinculada con el actual concesionario Crown Casinos, aparente relacionado con Ferrari.
Comentó que la empresa El Muro SA, del grupo Ferrari, que opera en San Luis, es conducida por directores de Crown, que identificó como el abogado Omar Zuain y el contador Manuel Bruno, y consideró ello como “un hecho significativo” que merece la apertura de una investigación judicial.
Inmediatamente, repitió que Zuain y Bruno actuaron en la conformación de Crown, según refirió de datos recogidos minutos ante de internet.
Martínez fue concejal roquense, convencional constituyente provincial, fiscal de Estado adjunto y ministro de Coordinación y en ese último carácter registró irregularidades en la concesión de los juegos de azar. Antes de su declaración, ofrecieron testimonios el ex intendente de San Antonio Oeste, Walter Zonco y el actual secretario de Promoción y Desarrollo Social del Ministerio de Familia, Ricardo Prati. Sus declaraciones no insumieron más de 30 minutos.
En cambio, en su extensa declaración, Martínez reconoció que actuó como fiscal en relación con las firmas VARSA y Casinos y señaló que la licitación de aquella firma fue “absolutamente irregular” y recordó que cuando asumió como fiscal de Estado, el 3 de diciembre de 1997, al igual que Irigoyen, “advertí situaciones irregulares o extrañas”, entre ellas que había salas de juego que daban pérdidas a la provincia, aunque también remarcó que se le otorgó a Casinos Río Negro mayores plazos para realizar obras sin tener en cuenta la existencia de deudas con la AFIP y cheques rechazados.
Observó por entonces, inicialmente, hubo rigurosidad en la protección de los intereses del Estado, pero, después, cierta contemplación con VARSA, Casinos RN y Casinos del Sur (Bariloche). “No se podía ser permisivo con una empresa (VARSA) que incumplía” desde que un tiempo atrás de cuando asumió como ministro de Coordinación, el 10 de diciembre de 1999.
Cuando el abogado defensor de uno de los tres imputados (Irigoyen, Ferrari y Santamaría) le preguntó si el ex interventor le comunicó las causales de la rescisión del contrato a Casinos RN, Martínez afirmó que “había suficientes causales, pero no me lo comunicó Irigoyen”, mientras reconoció que se trabajó en la línea gubernamental de dejar sin efecto el convenio con el concesionario de los juegos de azar.
Después, el funcionario judicial desestimó dichos de Irigoyen en cuanto a la presentación de la empresa Codere. “Es un disparate”, enfatizó indicando que esa firma estaba en negociaciones con el entonces titular de la Lotería.
Más adelante en su declaración refirió que le consultaron acerca de la viabilidad que Codere encare una iniciativa privada para explotar los juegos de azar, en posible reemplazo del grupo Ferrari, y comentó que en año 2001 aquella firma presentó formalmente la pretensión de iniciativa privada “que era el mecanismo adecuado, porque planteaba mejorar los canon y mejor participación e inversiones, como también ofrecía garantías muy importantes”. No obstante, reconoció que “se empantanó el trámite” porque no hubo respuestas de la Lotería.
Aunque recordó que la rescisión del contrato con el grupo Ferrari concluyó en enero de 2003, “hacía mucho tiempo que las relaciones mías con Irigoyen estaban en un punto muerto y el expediente de iniciativa privada no siguió, que era la presentación hecha por Codere”.
Del actual concesionario Crown Casinos, el auditor general exhibió documentación y detalló: “De un capital de 100 dólares, pasó a aportar 3.200.000; la valija de Antonini queda corta. No se puede justificar”, remarcó y hasta deslizó la frase “lavado de dinero”.
También cuestionó a Casinos del Sur, de Bariloche, que “estaba operando en una cochera y le habilitaron una sala de máquinas tragamonedas en un barrio cadenciado de Bariloche”.
Fuente: adn

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