Bolivia - Los lugares de mayor concentración de gente, como los mercados y las paradas de los micros en los barrios, son muy apetecidos para la instalación de máquinas tragamonedas. La comuna capitalina lleva contabilizados 2.820 aparatos ilegales, por lo que el pasado viernes reinició los operativos para decomisarlos. Por su parte, la Lotería Nacional espera contar con una nueva regulación para los juegos de azar hasta el primer trimestre de 2009.
En las últimas semanas en el mercado Mutualista proliferaron las salas de juego en centros comerciales aledaños, resultando que la mayoría son de propiedad de la empresa Corhart, la que obtuvo sus licencias de la municipalidad luego de ganarle un amparo constitucional.
El director de Defensa al Consumidor, Gary Prado, manifestó que las tragamonedas son un dolor de cabeza en la ciudad, pues se reproducen en todos lados porque, según él, el costo para ensamblarlas es de $us 250 por unidad.
“Sabemos que en varios locales del mercado La Ramada ganan hasta $us 50 por día en cada aparato, es por esa razón que cuando las decomisamos muchos propietarios no vienen a reclamarlas. Hay almacenadas más de 400 tragamonedas de los anteriores meses”, reveló.
Sin embargo, en días pasados han decomisado otro tipo de máquinas llamadas ‘tragabilletes’ que son ensambladas en Brasil. “Son más sofisticadas y más caras”, indicó.
Referente a las empresas de juego de azar que operaban en el país, sólo Lótex y Corhart cuentan con la licencia de la Lotería Nacional para instalar máquinas en varias salas en la ciudad.
Por su parte, el fiscal adscrito a la Dirección de Defensa al Consumidor, Alberto Cornejo, dijo que al no ser delitos de orden público el Ministerio Público dejó de participar en los operativos.
El director jurídico de la Lotería Nacional, Wilfredo Limache, expresó que en el Ministerio de Salud, del cual depende la entidad, están estudiando la manera de diferenciar los juegos de azar para adultos, cuya regulación es nacional, y la de los de niños, que es controlada por cada municipio.
Sin embargo, el experto en derecho comercial Óscar Barón recordó que toda clase de juegos de azar son prohibidos en Bolivia, aunque en el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada se le autorizó a la Lotería Nacional instalar cierto tipo de salas. “Se dio la luz verde para que muchas empresas se metan por la ventana e instalen las tragamonedas”, aseveró.
No cesan los operativos
Luego de 45 días, el pasado 3 de octubre la Dirección de Defensa al Consumidor retomó los decomisos de tragamonedas. Hasta el momento hay almacenadas 300 máquinas de los operativos realizados en los mercados de la Villa Primero de Mayo, Plan Tres Mil, Mutualista, La Ramada y Los Lotes.
“Sólo entramos a las salas que no tienen permiso para operar las máquinas. También hemos detectado que locales que tienen permiso para ser peluquerías, locutorios u otra actividad incurren en el delito de montar una máquina de juego”, declaró Fernando Chalar, jefe de Fiscalización de Defensa al Consumidor.
Los reincidentes son susceptibles a que les clausuren definitivamente el negocio.
Fuente: eldeber
jueves, 9 de octubre de 2008
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