Argentina - Cinco años atrás esta daba sus primeros pasos en el Sector de los Juegos de Azar, orientados a representar una Industria con un gran desarrollo, una gran potencialidad y en plena expansión.
Por Saturnino Ortiz (*)
En aquellos días de convicciones firmes se enunciaron los fundamentos del Estatuto de la Cámara y el tácito Código de Ética que salvaguardaría los intereses de todos sus asociados.
Sólo han pasado cinco años y nos encontramos con que muchas cosas han cambiado y, quizás, no todas para bien del futuro de la entidad.
FUGA DE SOCIOS
La gestión del actual Presidente de la Cámara, Sr. Daniel Galimberti, se ha visto empañada por algunas iniciativas poco felices, no aceptadas por la mayoría de los socios. Esto motivó la desvinculación de un importante número de empresas, de las más representativas del Sector. No falta quienes atribuyan este éxodo a las medidas institucionales adoptadas por Galimberti, asesorado por Carlos “Cacho” Ferrari.
Y las suspicacias surgen de las evidencias: actualmente la Cámara cuenta con no más de diez empresas asociadas. La mayoría muy vinculadas a Galimberti y Ferrari. La desafortunada idea de crear un evento expositivo contrario a disposiciones estatutarias y a la ética arriba mencionada, fue el detonante que provocó este alejamiento masivo de socios.
Utilizando el alto prestigio de la Cámara, madurado y puesto en valor en estos últimos años, especialmente en los que transcurrieron bajo la presidencia de Miguel Cóppola, han recurrido a la buena fe de algunos Organismos e Instituciones, como A.L.E.A. que, al mencionarlos (con no poca picardía) quedan erróneamente involucradas como co-organizadores de un emprendimiento denominado “MAGIA” que no tiene otro propósito más que el de una estrategia comercial que beneficiaría a unos pocos fabricantes argentinos.
Pero como la mentira tiene “patas cortas”, la verdad la alcanza no bien se echa a correr y este “exabrupto institucional” obligó a algunos directivos del ente oficial involucrado, a salir a aclarar el verdadero alcance de la participación en ese evento.
En algún momento la Cámara de la Industria del Juego bregó denodadamente por conseguir que en nuestro país se realizara una Exposición única de materiales para los juegos de azar. Es por ello que sorprendió, y sigue sorprendiendo, la actitud de los actuales directivos de la misma Cámara. Son coincidentes con esta apreciación, importantes empresas del Sector, como así también Organismos públicos y privados de relevante accionar que estiman inoportuno y extemporáneo el intento de encarar un evento expositivo en abierta competencia con una empresa que lidera el Sector desde hace quince años y está ubicado en tercer lugar en el mundo, después de Londres y Las Vegas.
(*) Saturnino Ortiz es autor de “CASINO… pasiones en juego”
Editorial De los Cuatro Vientos – Buenos Aires- 2008.
jueves, 2 de octubre de 2008
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