Detienen a un hombre que utilizaba ácido para provocar cortocircuitos en máquinas de azar

España - Los Mossos d'Esquadra han detenido a un hombre acusado de 'vaciar' tragaperras de varios salones recreativos de la comarca del Maresme, donde acudía con un paquete de tabaco con un orificio del que vertía ácido corrosivo sobre la máquina de juego para provocar un cortocircuito y ganar gran cantidad de dinero.
El detenido, Chong L., un ciudadano chino de 30 años y vecino de Barcelona, ha quedado en libertad con cargos por orden judicial. El acusado actuaba supuestamente con dos cómplices, que los Mossos esperan poder detener en las próximas horas. Los tres supuestos estafadores acudían repetidamente a salones recreativos de Calella y Pineda de Mar, en Barcelona.
Chong L. supuestamente escogía una máquina tragaperras del tipo ruleta, en la que pueden apostar varios jugadores simultáneamente. Tras iniciar su partida, colocaba un paquete de tabaco sobre la ranura por la que se introducían las monedas. El paquete llevaba dentro una pequeña botella con ácido corrosivo, que se vertía a través del orificio situado en la parte superior.
Mientras Chong L. vertía la sustancia a la máquina, uno de sus cómplices supuestamente se ponía detrás de él para evitar que descubrieran la manipulación, mientras que un tercer ayudante vigilaba el entorno y distraía al personal del establecimiento.
El ácido provocaba un cortocircuito en la placa de control del monedero de la máquina tragaperras, de forma que no leía la cantidad real de monedas que le introducía sino una muy superior. Después de dejar que el ácido hiciera su trabajo, el segundo jugador se sentaba frente a la máquina, pulsaba la tecla para cancelar la jugada y la máquina le retornaba una cifra de monedas muy superior a la que habían apostado.
Algunos trabajadores empezaron a sospechar de esta manipulación cuando los supuestos estafadores reclamaban como premio una cantidad mucho más alta que la que el juego estaba programado para otorgar. Como ocurrió el pasado 10 de septiembre en Calella, cuando los supuestos estafadores trataron de cobrar 824 euros mientras que el premio máximo era de 600. Los responsables del local se negaron a pagarles el dinero y dieron la alerta a todos los establecimientos de la cadena.
Pese a ello, dos horas más tarde entraron en otro local de Calella, propiedad de la misma compañía, donde lograron llevarse un botín de 90 euros. Aquel mismo día entraron en otro salón recreativo de Malgrat de Mar, en el que lograron 'vaciar' 983 euros de una de las ruletas.
Además del botín obtenido, los tres supuestos estafadores provocaban con el ácido corrosivo daños en las ruletas que obligaba a invertir entre 700 y 1.200 euros para repararlas.
Gracias a las cámaras de seguridad de algunos de estos establecimientos, se pudo identificar a Chong L., que fue detenido el 1 de octubre en un salón recreativo de la calle Rocafort de Barcelona. Cuando se registró su vehículo, se encontró un paquete de tabaco perforado con un pequeño botellín dentro y dos botellas más, una de ellas con ácido corrosivo.
Los Mossos mantienen la investigación abierta para poder detener a los dos supuestos cómplices y para poder atribuirles otros casos parecidos cometidos en la demarcación de Barcelona.
Fuente: elmundo