Argentina - San Luis. Cientos de personas llegaron al predio para ver las carreras y disfrutar de los espectáculos de gospel, tango. Los más chicos se divirtieron en los payasos, magos y castillos inflables.
En una mañana cálida y ventosa quedó inaugurada la pista de turf de 2.200 metros, la confitería con capacidad para 120 personas, las gradas y los palcos; la primera etapa de la Villa Hípica La Punta, un complejo de 1500 hectáreas.
Para recibir por primera vez al público, debajo de la loma que aloja el moderno edificio, se armaron tres carpas comedor, castillos inflables, una carpa de la Cruz Roja y otra de informes, justo en frente de la concurrida zona de apuestas. Un poco más allá, dos stands que vendían camperas de cuero, remeras y gorras tenían una gran concurrencia, enfrente, una hilera de baños químicos.
Al medio de la zona recreativa y gastronómica se montó un escenario en el que, alrededor de las 11, se lució el Gospel Choir de Córdoba. Más tarde dos coloridos payasos alegraron a los más chicos con juegos, chistes y travesuras y, por la tarde, fue el escenario para un mini recital de tango a cargo de Néstor Fabián y de un espectáculo de magia.
Sin que el viento dejara de soplar se corrió el premio Torch a las 11, Handicap Royal Heart al mediodía y Rincón Español a las 13.
Según lo previsto, luego que los ganadores de está última competencia recibieran sus premios, el gobernador Alberto Rodríguez Saá, se haría presente para tocar la campana y dejar inaugurado formalmente las instalaciones, esto fue reprogramado y, en cambio, la tarea reservada al Gobernador fue la de descubrir una placa en el hall de la confitería. Hecho esto la comitiva se dirigió al sector vip en el tercer piso de las instalaciones.
Antes de que largara a las 14.30 el Gran Premio Inaugural “Jorge Alberto Laffue”, el cantante Néstor Fabián deleitó a los presentes interpretando el tango “Por una cabeza” en la zona de la pista, que los altoparlantes se encargaron de llevar a todo el predio.
A medida que pasaban las horas, más y más autos buscaban un lugar en los estacionamientos, aún no terminados, con ayuda de la Policía Caminera y personal de la empresa.
El césped verde que divide las gradas del estadio, fue para muchos, el sitio perfecto para desplegar la sillita playera o acomodarse en el mismo suelo para disfrutar unos mates.
Familias enteras, papás con pequeños niños, grupos de amigos, fanáticos y curiosos, todos se congregaron allí para conocer la nueva opción deportiva que ofrece la provincia.
Estaban quienes, conocedores de los “burros”, buscaban un lugarcito bien pegados a la pista y se aferraban al sombrero que el viento les quería quitar. También algunas mujeres que, subidas a altos tacos, no dejaban la zona de piso de cemento y otras que ataviadas con botas y pantalones de montar recorrían el predio. Los niños disfrutaban de los juegos y los perros, fundamentalmente caniches, del paseo al aire libre.
El público se veía distendido, hasta que comenzaba la carrera. Una vez que los caballos tomaban velocidad, comenzaban la agitación y los gritos. Los binoculares se pegaban a los ojos y mientras una mano los sostenía, la otra sacudía el comprobante de la apuesta. Mientras Carlitos Way, Reintegrado, Diablazo Arturo y sus compañeros cruzaban la meta, algunos sonreían y se abrazaban, otros inspeccionaban la billetera para saber si ya era hora de irse a casa o aún podían arriesgar un poco más, y otros tantos sólo bajaban la cabeza y miraban fijo el suelo, como buscando un dato.
Las actividades concluyeron alrededor de las 17, cuando cruzaron la meta los 11 machos que se debatían la copa de La Punta Juniors.
La Villa Hípica La Punta estará completa antes de fin de año, cuando se inaugure un casino, un hotel 4 estrellas, restaurant, juegos infantiles, cyber, un paseo comercial y un salón “Tatersall”, con capacidad para 250 personas, que estará disponible tanto para remates equinos como para eventos sociales y empresariales. Además de estacionamientos subterráneos y descubiertos.
Fuente: eldiariodelarepublica
lunes, 1 de septiembre de 2008
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