lunes, 17 de noviembre de 2008

Era empleado, lo acusaron de ladrón y resultó ser inocente

Argentina - Un joven trabajaba en el casino Regency. Lo acusaron de conformar la banda que casi se lleva $ 1 millón en 2006, pero en el juicio oral lo absolvieron lisa y llanamente.
El 30 de octubre de 2006, una banda compuesta por cuatro asaltantes armados intentó llegar hasta la bóveda del Regency Casino aunque no lo logró. Los cuatro fueron detenidos por la policía pero entre ellos, a la investigación se le coló un presunto quinto secuaz: Gonzalo Ferri, quien por entonces era empleado del casino y fue signado como el que les abrió la puerta de la bóveda a los ladrones.
Ferri llegó a estar imputado por el caso y de hecho se pasó una semana preso. Él siempre dijo que no conocía a los integrantes de la gavilla pero sus palabras no fueron escuchadas. Aunque en libertad, siguió ligado al proceso hasta que en noviembre del año pasado tuvo lugar el juicio abreviado con los cuatro sospechosos (Claudio Gatto, Ángel Díaz Quiroga, Luis Laguna y Alejandro Cappadona): todos fueron condenados.
Ferri, por su parte, no hizo uso de la opción del juicio abreviado y solicitó un debate oral y público "para que pudiera demostrar su inocencia al cien por cien", indicó a este diario la hermana del acusado, la abogada Laura Ferri.
Absuelto
De ese modo, el 27 de agosto de este año, Gonzalo Ferri fue absuelto "lisa y llanamente" del delito de "participación primaria en el delito de robo agravado en poblado y en banda en grado de tentativa", según se lee en la resolución firmada por los jueces de la Quinta Cámara del Crimen, Alejandro Gullé, Alejandro Brizuela y María Liliana de Aymerich.
Con esto, el honor de Ferri quedó a resguardo en lo judicial, pero su hermana -la abogada- solicitó también que por caso, diario Los Andes, diera a conocer el veredicto en calidad de derecho a réplica, "ya que en varias notas el nombre de Ferri aparecía como partícipe de un hecho que no cometió", según dijo la letrada.
El caso sucedió el 30 de octubre de 2006 cuando los delincuentes irrumpieron por la playa de estacionamiento del casino Regency y luego de amenazar a Ferri lo obligaron a que les abriera la bóveda donde supuestamente había una gran cantidad de dinero. Ferri por entonces era el supervisor de caja de la firma. También quedó acreditado que el ladrón que llevó al supervisor hasta esa zona del casino (el condenado Luis Laguna) estaba armado.
Con la detención de los cuatro asaltantes, ya que no pudieron escapar porque Ferri los condujo hasta un lugar donde no se podía salir, el golpe quedó abortado y el dinero fue recuperado.
Sólo que para la instrucción del caso, Ferri era parte de la banda. Algo que casi dos años después, quedó demostrado que no era así.
Fuente: losandes

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