USA - La Tribu Seminole comenzó a operar las máquinas de juego estilo Las Vegas ayer, aun cuando los votantes de Miami-Dade se preparaban para decidir si crear más competencia para el enorme casino Hard Rock de la tribu cerca de Hollywood.
Las nuevas máquinas Clase III ponen al Hotel y Casino Hard Rock de los Seminoles, en Stirling Road y US-441, en la reservación de la tribu en Hollywood a la par con los cuatro casinos/hipódromos que han abierto desde que los votantes de Broward los aprobaron.
Las tragamonedas Clase III permiten que los jugadores jueguen sólo contra la casa, comparado con las máquinas Clase II, que están conectadas de manera que los jugadores compitan entre sí en una especie de bingo electrónico.
La tribu ha querido las máquinas estilo Vegas durante décadas, pero especialmente desde que los cuatro casinos/hipódromos las tienen.
''Ya era hora de que tuviéramos este histórico día'', indicó el jefe ejecutivo de Seminole Hard Rock, Jim Allen.
La tribu firmó un contrato con el gobernador Charlie Crist en noviembre, permitiendo las nuevas máquina. El presidente de la Cámara de la Florida, Marco Rubio, y el presidente del Senado Ken Pruitt han retado la legalidad del contrato en corte.
La Corte Suprema del estado seberá escuchar argumentos sobre la validez del contrato el miércoles.
El contrato también permite a la tribu introducir juegos de blackjack y otros juegos de mesa. Allen dijo que los nuevos juegos debutarán en el Seminole Hard Rock de Hollywood este verano en un nuevo edificio de 64 mesas.
Allen comentó que usualmente se toma hasta 16 semanas para instalar las máquinas tragamonedas que se ordenaron. Pero esta vez se tomó dos semanas, incluyendo obtener los permisos legales.
El lunes, el Hard Rock celebró las nuevas máquinas de juego en una ceremonia que presentó a la leyenda de la lucha libre profesional Hulk Hogan y siete funcionarios seminoles inauguraron las tragamonedas en medio de un rocío de fuegos artificiales.
Jóvenes artistas pintadas en dorado se paseaban mientras hablaban los funcionarios seminoles y del casino.
''El gobernador Crist comprendió lo que la gente necesitaba en el estado de la Florida y el dinero que traerá'', expresó el presidente de los seminoles Mitchell Cypress, quien agregó que el sistema de educación del estado será financiado con al menos $100 millones anuales del dinero producido por las tragamonedas de los seminoles como parte del contrato.
Pero los jugadores de tragamonedas entrevistados ayer tenían una respuesta de tres palabras a todo este entusiasmo: muéstrame el dinero.
A diferencia de los casinos/hipódromos la tribu no revela la tasa de pago, que es el porcentaje del dinero que acumularon las máquinas y que se devolvió a los jugadores como ganancias.
Hasta ayer, la tasa de pago ofrecida por Isle Casino es de 91.9 por ciento.
El estado de la Florida ordena que la tasa de pago en las parimutuales sea al menos de 85 por ciento, aunque esa regla no se aplica a los seminoles. El promedio de pago en los casinos de Las Vegas es 95 por ciento.
Yvonne McCoy, de 50 años, aficionada a las máquinas, recientemente cambió del hipódromo/casino de Gulfstream Park para jugar en el Mardi Gras, donde dice que hace más dinero.
Ayer Mardi Gras ofrecía un porcentaje de 92.7 en la tasa de pago, mientras que Gulfstream daba un 92.4 por ciento.
McCoy dijo que dejó de jugar hace meses en el Hard Rock porque ''las tragamonedas Clase II no daban mucho''. Espera que las nuevas máquinas de Hard Rock ofrezcan mejor pago.
Allen dijo que su casino ofrece pagos más altos que cualquiera de las parimutuales en Broward pero rehusó citar una cifra.
Dan Adkins, presidente de Mardi Gras, indicó que si Hard Rock realmente ofreciera mejores negocios para los jugadores con sus tragamonedas, lo anunciarían.
''Los ingresos de mis máquinas tienen impuestos de casi el 60 por ciento, mientras que lo más que los seminoles pagarán en sus impuestos es de un 25 por ciento'', manifestó Adkins.
Hasta el lunes, 800 de las 2,500 máquinas de Seminole Hard Rock eran de Clase III.
Allen dijo que para marzo ambos casinos en Hollywood, y otro en Coconut Creek, estarían funcionando con las máquinas de Clase III.
Las máquinas no están distinguidas con letreros en cuanto a clase, por lo que un jugador inexperimentado podría no notar la diferencia.
Fuente: El Nuevo Herald
martes, 29 de enero de 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario