España - La organización ONCE fue creada en 1938 con el objetivo de integrar y promocionar a personas ciegas en la vida laboral por medio de diversas actividades entre las que siempre ha destacado la venta de cupones de lotería.
El primer sorteo se realizaría un año después de la inauguración de la asociación, y el número agraciado resultó ser el 922, dado que el cupón se componía solo de tres cifras. Actualmente trabajan en ella más de 21.000 vendedores de cupón.
Los primeros cupones se denominaban “Cupones Pro-Ciegos” y se rifaron en diferentes ciudades donde las personas invidentes habían creado sociedades como La Caridad (en Alicante), La Lira (en Almería), El Porvenir (en Valencia),El Porvenir de los Ciegos (en Madrid), o La Hispalense (en Sevilla). Dichas asociaciones tuvieron mucha aceptación y se repartieron rápidamente por toda España. Poco después nacería la ONCE, tras el convencimiento del entonces presidente, Alejandro Lerroux, de la necesidad de legalizar la venta de cupones como fórmula para la integración de las personas invidentes.
Con la Guerra Civil española, la necesidad de aunar esfuerzos por la causa de las personas ciegas se engrandece. El número de invidentes aumenta ante nuevos casos resultados de heridas de guerra. Esta situación llevaría a que el 13 de diciembre de 1938 el Gobierno publicara el decreto que formalizaría el nacimiento de la ONCE como organización, con la concesión de explotar un sistema de lotería del estado.
Así se abandonaba la opción de aportar un subsidio diario a cada ciego, prefiriéndose la que consistía en su integración en la vida laboral dentro de sus posibilidades. Esto supuso la victoria de la iniciativa de los ciegos españoles, que reivindicaban su derecho a valerse por sí mismos y a aprovechar sus capacidades sin ser una carga para sus conciudadanos.
A partir de este momento, las rifas de las múltiples asociaciones de ciegos que entonces convivían, se fueron uniendo a la nueva marca común, la ONCE. En 1984, la ONCE reforma su cupón y apuesta por un sorteo único para toda España, con un premio que ascendía a 100.000 pesetas diarias. Tras él, en 1985, nacerá el Super-Sorteo Fin de Semana, con un premio de 2 millones de pesetas. En octubre de 1987 nace “El Cuponazo”, que introduce un premio especial de 100 millones de pesetas y se presenta con una gran campaña publicitaria.
Desde entonces los cupones han ido mejorando y reformándose para seguir respondiendo a las expectativas de sus clientes, y para abrirse paso en el mercado del juego, donde la competencia cada vez es más dura. La ONCE ha puesto en marcha en los últimos años numerosos Sorteos extraordinarios como el del Día del Padre, el de San Juan, o el del Día de la Madre. La filosofía de los comienzos de la organización sigue vigente en el esfuerzo cotidiano de 21.000 vendedores de cupón, ya con diferentes discapacidades.
Fuente: rioja2
jueves, 4 de junio de 2009
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