Al contrario de lo que dicen, no fue Omar Shariff sino Albert Einstein quién concluyó: "la única manera de ganar en la ruleta es embolsar la guita cuando el crupier esta mirando para otro lado".
Procediendo este aviso de uno de los más grandes genios de la Ciencia Moderna, uno pensaría que los que timbeaban esta modalidad lúdica se habrían dedicado al "Juego de la Oca" y los casinos ya se habrían fundido hace muchos años. Sin embargo, no fue así. Los casinos están muy bien, gracias. Continúan juntando guita con la pala.
Porque la gente es loca. Si a la gente le dicen que hay un trillón de estrellas en las galaxias, siempre se lo cree.
Ahora cuando le dicen que un banco está recién pintado, tienen que ir a tocarlo. Salvo algún Isidoro que otro, casi todo el mundo sabe que es improbable ganar en la ruleta. Sin embargo, desde que se inventó, millones de personas concurren a los casinos con la remota esperanza de hacerlos pedir por favor que se vayan. Algunos (casi todos) concurren provistos de amuletos, talismanes, mascotas, fetiches y cábalas de los mas variados tipos, tamaños y colores que, obviamente, funcionan cuando se les canta el culo.
Desde el "váyanle poniendo ruedas a la mesa" al esperanzoso "vieja, prepará unos pollos", cualquier tipo de frases ufanistas cabe en el universo de quienes se lanzan sobre las sigilosas moquetas de los casinos. Otros, los cientificistas, elucubran sistemas o métodos matemáticos sobre los cuales se pasan años estudiando y calculando probabilidades. Pero el cientificismo no es más que una teoría.
Sin embargo, y esto es lo más importante para los timberos, a menos que la ruleta modifique el uso de la conocida rueda horizontal con la bolita girando en sentido contrario, la frase de Einstein corre serio riesgo de hundirse en el baúl de los juicios, ya superados por el adelanto tecnológico. Y los casinos, ahora sí, corren serios riesgos de fundirse de una vez por todas.
Según informa el diario inglés The Guardián, Scotland Yard está investigando una denuncia hecha por el casino que funciona en el prestigioso hotel Ritz, según la cual el casino, habría sido victima de una estafa millonaria. Los detectives están investigando una banda que usó un scanner láser oculto en un teléfono celular y conectado a un computador, para hacer saltar la banca.
Según se supo, dos hombres y una mujer fueron capaces de recoger una fortuna, apostando a un cierto grupo de números, guiados por un computador que les indicaba en que sector de la rueda la bolilla iba a caer. Scotland Yard describió el caso como "complejo" y personal especializado en ese tipo de crímenes, está tratando de descifrar como fue realizado el fraude.
De acuerdo con el diario, se sabe que dos serbios y una húngara visitaron dos veces el casino. La primera noche, se las picaron con 100 mil libras (180 mil dólares). Regresaron la noche siguiente para llevarse 1.2 millones de libras (2.16 millones de dólares) y demostrar que, como escolaseador, Einstein era un físico de la gran puta.
El casino les habría pagado 300 mil libras en dinero y el saldo con un cheque. Pero, como es de rutina en estos casos en que el casino pierde guita (mucha) estudiaron las filmaciones de las cámaras internas y llamaron a la cana. (Los dueños de los casinos son increíbles: Cuando pierden, llaman a la policía. Cuando uno pierde, ni siquiera te llaman un taxi).
Scotland Yard confirmó que cuando la policía arrestó a los tres en un hotel, estos estaban en poder de grandes cantidades de dinero (chocolate por la noticia) y que también se les confiscó algunos teléfonos celulares. Los tres fueron dejados en libertad bajo fianza.
El diario supone que el suceso de la banda se basó en una teoría relativamente simple:
1. Un scanner se oculta en un teléfono celular con el propósito de medir la velocidad con que la rueda ha de girar cuando el crupier la ponga en movimiento.
2. El láser mide la velocidad de la bolilla, ya sea cuando es lanzada, como cuando pasa por un punto previamente determinado. El declino de la órbita de la bolilla, es calculado entonces. "Declino de la órbita " explicado por un animal como yo, viene a ser que la bolilla tiende a perder velocidad y a girar cada vez más cerca de los números. Como cada vuelta que da es diferente de la anterior, o sea más baja, a esta diferencia entre un giro y otro se le llama "declino de la órbita"
3. Estas mediciones son enviadas a un computador que calcula en que área de la rueda la bolilla irá a parar. Si bien no puede indicar el número exacto en donde la bolilla irá a detenerse (aunque no debe faltar mucho), se puede saber sí, en que sector. Sabiendo los números que se encuentran en el mismo, se amplían enormemente las posibilidades de acertar el número en donde la bolilla irá a parar.
4. El computador devuelve esta información al teléfono celular y entonces son hechas las apuestas, antes del fatídico "nooo vaaa maaassss". Toda la operación, no dura más que dos o tres segundos. Si. Dos o tres segundos!
Si bien este sistema ya había sido puesto en práctica y comprobado en un laboratorio, nadie se había atrevido hasta ahora a probarlo en un casino, con ciento de miles de libras en danza y la amenaza de ser descubierto.
En los años 80, el experto en juegos de azar Scott Lang, publicó un libro detallando como usar el cronómetro digital para calcular el sector de la rueda en que la bolilla iría a detenerse. Los casinos prohibieron entonces, los cronómetros.
Si bien se supone que este grupo de estafadores del hotel Ritz, ha logrado obtener una mayor precisión en calcular el declino de la órbita de la bolilla usando un scanner láser, no deja de ser asombrosa la velocidad conque fue realizado el proceso. Hazaña que debe estar retumbando en los casinos del mundo entero.
Y si bien los presuntos estafadores fueron identificados, es muy poco probable que puedan ser llevados a juicio.
Una ley del año1845, prohíbe el uso de aparatos ilegales en los casinos ingleses. Pero los sospechosos de este tipo de fraude, siempre usaron el irrefutable argumento de que usando simplemente un sistema, no interfieren con el juego en sí. De cualquier manera el gobierno de su majestad ya está en proceso de introducir nuevas leyes sobre el juego, con la esperanza de dejar claro lo que constituye una estafa al casino u otros lugares donde se juega por dinero.
Mister Mark Griffiths, único "Profesor de Apuestas" de Europa comentó sobre el particular: "En la ruleta, los sistemas basados en los cálculos matemáticos, vienen siendo usados hace años. Cuando usted consigue incorporar tecnología, las chances favorables aumentan". Pero no todos los expertos están convencidos. Tom Kavanagh secretario del Comité de Juegos, órgano que reglamenta los casinos, opina: "Siempre he oído hablar sobre estos aparatos inteligentes usados en los casino. Y lo que puedo decir es que jamás supe de alguno que hubiera funcionado".
En sus coquetos impresos, el hotel Ritz no sólo estimula, sino incita la presencia de jugadores de ruleta con algún plan de juego o "la precisa". Para ello, su lujoso material gráfico, anuncia con cruel ironía que "La Reina de los Casinos" es "ideal para aquellos jugadores que posean algún sistema".
Es muy probable que se tengan que morfar los folletos.
Nota: Julio César Barros – La Unión Digital – http://www.launion.com.ar/
sábado, 23 de junio de 2007
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