España - Valencia - La cubierta ondulada de cobre y con paneles solares lo convertirá en un edifico sostenible que podrá ahorrar un 60% de energía.En la moderna avenida de Corts Valencianes, entre el Hilton, el Palacio de Congresos y uno de los principales centros de negocios de la capital, el primer casino de Valencia toma forma.
Desafiando a la crisis que a pocos metros de allí ha dejado varadas las obras del nuevo Mestalla, los gestores del nuevo casino, en el que se han invertido 12 millones de euros, proyectan abrir sus puertas en el verano de 2010. Inicialmente se anunció que este nuevo templo de las máquinas de premio, llamado a ser el relevo generacional del famoso casino de Monte Picayo, abriría a final de año. Lo que estará para esa fecha será la estructura, el contenedor, después hay que vestir el edificio por dentro. El encargado será Nacho Moscardó, un conocido diseñador de locales de ocio.
Los planes de Cirsa para el "vetusto" y algo anticuado edificio del casino de Monte Picayo no están claros, pero se barajan dos opciones: derribarlo o rehabilitarlo. En cualquiera de los dos casos el uso futuro más probable será el de hotel. Este proyecto, no obstante, se desarrollará a partir de 2012 cuando, según las previsiones más realistas, se producirá la salida de la crisis económica. El arquitecto que ha diseñado el casino y dirige las obras, José María Lozano, explicó que el exterior del edificio es una caja de hormigón prefabricado y tematizado con diseños propios del despacho. Lo más llamativo desde el exterior es la cubierta de forma ondulada forrada con una película de cobre pulverizado. Según Lozano el de Valencia será el primer casino sostenible del país. El arquitecto ha previsto la instalación de paneles solares que proporcionarán energía al edificio y supondrán un ahorro energético de entre un 30 y un 60%. En eficiencia, afirma Lozano,"va a estar por encima de los mínimos que nos pide la legislación estatal".
El aspecto ambiental también se ha cuidado en la construcción del edificio ya que lo materiales se han traído desde un radio no superior a cien kilómetros para que el gasto en transporte y combustible fuera mínimo. Lozano también está trabajando en la hidroeficiencia del edificio de modo que el agua del aire acondicionado se aproveche -previo tratamiento de desinfección- para que pueda usarse como agua caliente sanitaria. Según Lozano, el de Valencia será el primer casino de nueva planta que construye Cirsa, una de las empresas más potentes del sector de las máquinas de juego.
Fuente: Levante




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