Los usuarios celebran la regulación de las líneas 905

España - Estos concursos, según la AUC, eran en realidad "sorteos encubiertos".
La Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC) ha valorado la publicación en el BOE del 12 de diciembre de una resolución de la Setsi por la que el código telefónico 905 se incluye en la regulación existente actualmente para los números 800 y para el 907, dedicados a servicios de tarificación adicional.
Este tratamiento de los 905 ha sido reivindicado de forma constante por las organizaciones de consumidores y usuarios desde que se aprobó la regulación de los 800, por entender, como así ha sido, que dejar fuera los 905 derivaría hacia esa numeración servicios deseosos de saltarse las normas, tal y como ocurrió en su momento con los 903.
El propio Preámbulo de la Resolución reconoce que la ambigüedad en la atribución de actividad al código 905 ("llamadas masivas"), y su regulación comparativamente más favorable, ha generado su utilización "en ciertos programas de entretenimiento, sondeos de opinión o concursos en los que se solicita la participación del público mediante la realización de una llamada telefónica cuyo importe sirve, además de para retribuir la llamada, para remunerar al abonado llamado por lo que estos servicios pueden considerarse de tarificación adicional".
A partir de ahora, el Código 905 se utilizará para la prestación de servicios de tarificación adicional basados en la recepción de llamadas masivas, diferenciando según la cuarta cifra marcada por el usuario llamante unos u otros servicios con diferentes precios. La norma distingue entre "televoto" (que permite el cómputo automatizado de llamadas recibidas) y "entretenimiento y usos profesionales" siempre que éstos recurran también a las llamadas masivas.
La norma aclara también que, cuando el servicio prestado pueda asimilarse a sorteos, apuestas y juegos de azar, deberán contar con la autorización correspondiente. Este aspecto es también algo reivindicado desde diferentes instancias por entender que en muchos casos los supuestos concursos televisivos son en realidad sorteos encubiertos.
Fuente: laopinion