martes, 20 de enero de 2009

La otra cara de enero

Argentina - Apostar al 31.
Al igual que la mayoría de las empresas, Codere cierra su balance el 31 de diciembre. Pero luego se terminan de consolidar los números con la casa matriz, en España y, al cabo de varias idas y vueltas, se hacen los ajustes necesarios y se rubrican las firmas faltantes. “Por lo tanto, enero termina siendo un mes de gran demanda laboral para los contadores de la firma”, explica Sebastián Parigi, gerente de Comunicaciones y Responsabilidad Social Corporativa.
Enero y febrero son meses que se usan para hacer la planificación comercial, operativa y el esquema de rotaciones e incentivos del personal de las 14 salas de bingo y tragamonedas que tiene la compañía en el país. Cuatro de ellas se encuentran en Mar del Plata, donde trabajan con refuerzos durante el verano. Por eso, aprovecharon el mes de noviembre para pedirle a Deloitte que capacite a todos sus jefes y gerentes en temas de atención a clientes y liderazgo operativo, para poder estar preparados desde enero para recibir al aluvión de turistas que irá a despuntar el vicio a las maquinitas.
Para todos estos trabajadores que están pálidos del aire acondicionado en la oficina porque aún no se pudieron ir de vacaciones está Sol Pleno, cadena con 3.000 centros de bronceado en el mundo. Ellos tampoco se van a la costa porque, al ser un producto totalmente estacional, lo venden como una alternativa para quienes no tienen tiempo o ganas de tomar sol, o que no se van de vacaciones, ya que en el verano todos quieren estar bronceados. En especial las mujeres, quienes suelen tener sus escotes y piernas más expuestas en los meses de calor.
Por eso, su temporada fuerte comienza en la primavera y se extiende hasta el fin del verano ya que, al regreso de las vacaciones, todos quieren hacer algo con tal de mantener el bronceado, así que en la empresa se toman licencia a partir de abril. De todos modos, se organizan de tal modo que cada uno tiene su back up, de modo que si alguien falta queda su reemplazo. Si hasta la telefonista también broncea y es capacitadora. “El hecho de tener todos puestos comodines nos sirve para resolver el tema de las vacaciones del personal quienes, al no tener chicos en edad escolar, no tienen la obligación de irse en la temporada”, explica Claudia Halac, directora de la firma.
Fuente: Mariano Gorodisch - cronista

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