Los trabajadores del Casino de La Vila se concentran al negarse a reabrirlo la mercantil

España - Alicante - Más de un centenar de trabajadores del casino de la Vila Joiosa volvieron a concentrarse ayer frente a la sala del Puerto de Alicante para protestar por los despidos y el cierre inesperado de la casa de juego, la semana pasada, por la mercantil Casinos del Mediterráneo.
Bajo el grito del "casino huele mal, apesta", los afectados por el presunto Expediente de Regulación de Empleo revindicaron sus derechos tras la negociación fallida con la patronal porque "ya no tenemos nada que perder" . Los afectados no reconocen el ERE porque "no han cumplido con las condiciones legales del mismo, por lo que lo consideramos un cierre patronal ", explicó ayer Jesús Navarro, del comité y responsable del sector del juego de UGT en el País Valencià.
"El 80% de los trabajadores", dicen las mismas fuentes, tienen aún sus pertenencias personales en el casino vilero ante la negativa de la empresa a dejarles entrar, y amenazan con denunciar en un futuro a la mercantil por ello.
Navarro asegura que "sólo quieren trabajar" pero que la política empresarial "desde hace cinco años ha ido contra la negociación y los trabajadores, por lo que no nos podemos fiar". Prueba de ello, dicen, son las diferentes condiciones laborales, porque en el casino de la Vila Joiosa un crupier cobra una media de 1.500 euros frente a los 800 del mismo profesional en Alicante o Torrevieja; dispone de 45 minutos para comer frente a los 30 no remunerados, y en los que no puede abandonar el casino; o jornada intensiva frente a otra de 17 a 21 horas y de 23 a 5. Los trabajadores de Alicante y Torrevieja deben pagar 80 euros mensuales por el parking frente a la gratuidad del servicio para los vileros.
Estas diferencias creen que pueden haber motivado "el cierre y posible reapertura en un futuro con otros trabajadores en peores condiciones", según José Antonio Conejero, presidente del comité de empresa, y que "explicaría" el cese de actividad durante seis meses con el permiso especial de la Generalitat.
Aunque está prevista una nueva reunión el próximo miércoles, aseguran que no piensan "quedarse de brazos cruzados en casa ante esta injusticia". Desde el comité de empresa también desmienten que hayan recibido citación alguna de la Inspección de Trabajo de Alicante para emitir el ERE.
Autor: María José Sánchez Valenzuela Fuente: Diario Información