Uruguay - Tras la concentración de los fabricantes y arrendadores de slots, el abogado del gremio, Gerardo Dibbern, manifestó las razones por las cuales rechazan el proyecto de gobierno.
El abogado manifestó que se busca ser recibidos por los legisladores para encontrar soluciones para que las máquinas estén acotadas y legislar sobre la nueva modalidad de juego en el país.
“La posición nuestra es contraria a la prohibición, justamente lo que buscamos hace cinco años es regular y reglamentar la actividad de las tragamonedas barriales, tal cual sucede en otros países. Ya se ha regulado en España, Italia, Canadá; y nosotros más o menos al estilo uruguayo queremos reglamentar esta actividad que genera miles de fuentes de trabajo, no hay que olvidar que las máquinas están en los pequeños comercios, en los bares, las cantinas.
Sin duda que cuando uno no conoce ve el tema de la patología, ve la parte mala, algún menor jugando, que nosotros obviamente estamos en contra”, señaló Dibbern.
El Poder Ejecutivo califica de ilegal esta actividad porque el Estado posee el monopolio legal del juego y argumenta que en estas maquinitas juegan menores.
Por otra parte se sostiene que se desconoce el porcentaje de premio que pagan estos slots que proliferan en cantinas, bares y clubes sociales de barrios de Montevideo y el interior.
Dibbern reconoce que si bien hay muchos menores que pueden acceder a estos juegos de maquinitas, entiende que el tema es más complejo y trasciende la situación de las tragamonedas.
La gremial pide limitar la cantidad de máquinas tragamonedas y que sean ubicadas en lugares específicos donde no puedan ingresar los menores
Fuente: espectador
jueves, 30 de julio de 2009
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario