Chile - “Viva Las Vegas”. La famosa canción de Elvis fue la primera que se nos vino a la mente al entrar al nuevo casino en San Francisco de Mostazal.
Monticello se acerca y es inevitable notar su forma redonda y sus curvas, lo cual se repite dentro del lugar. Y es que su arquitectura se estableció considerando el amplio rango de instalaciones que tendría y tomando en cuenta las condiciones climáticas de la región. Es por eso que para la fachada fueron utilizados materiales como piedra y madera. Sin embargo, como se encuentra entre dos carreteras, fue necesario utilizar grandes cortinas de vidrio para blindar acústicamente el edificio.
“Casino en la montaña con vista al cielo en el reino del sol”. Esa es la traducción de Monticello según el arquitecto sudafricano Raymond Duxbury quien, junto con su empresa Northpoint, fue el encargado de la construcción y decoración del casino ubicado en San Francisco de Mostazal. Con 15.000 metros cuadrados construidos, 80 mesas de juego y 1.500 máquinas de azar, Monticello Grand Casino y Mundo de Entretención es el más grande de Chile y Sudamérica.
Por los sólo 57 kilómetros que lo separan de Santiago, busca posicionarse como el “casino de los capitalinos” e insertarse en el mundo de la entretención como una alternativa más. “Se puede ir al cine, a un restaurante, a un concierto o al casino. Hoy es una manera más de entretención y no sólo para los adultos sino que para toda la familia, ya que próximamente se inaugurará un centro de entretención, un anfiteatro, un centro cultural y una guardería infantil”, explica George Garcelon, gerente general de Monticello.
Con respecto al diseño, inicialmente estuvo a cargo del arquitecto peruano Guillermo Gómez Morán, quien planteó la idea de que éste girara en torno a la cultura egipcia. Sin embargo, cuando Northpoint tomó las riendas del asunto, decidieron que debían hacer una serie de cambios. “Rediseñamos el interior, pero no sólo desde un punto de vista funcional, sino también en términos de temática y concordamos con nuestros clientes -Sun International- con que el tema más apropiado para la región era Latinoamérica contemporánea”, nos cuenta Duxbury.
Y el tema elegido no fue para nada casualidad. Para Northpoint es fundamental que todos sus proyectos tengan un sentido conceptual del espacio entre sus raíces históricas, demográficas y geográficas. “Al ser el casino más grande en Sudamérica, abarca mucho de lo que el continente tiene que ofrecer en términos de su historia, cultura, arte y paisaje, lo cual nos dio un gran tapiz para trabajar”, explica el arquitecto. Además, destaca que trabajaron con artistas chilenos, como Macarena Yrarrázaval y Francisca Núñez, para crear obras de arte, tejidos y esculturas originales y relevantes para la sociedad chilena.
La iluminación juega un papel importante en el interior y exterior. Apenas cae la noche, la fachada se ilumina con colores que le dan una estructura cambiante y visible desde la carretera. Al interior, las luces buscan dotar de dinamismo al espacio. “El casino es una experiencia corta, por lo que debe concentrar emociones y sensaciones. Todo es estridente y para estar siempre entretenido y sorprendido, las luces juegan un papel muy importante”, explica Ignacio Hernández, arquitecto y gerente general de Archiplan, empresa chilena de arquitectura que, junto a Northpoint, trabaja en el Casino Monticello.
El casino incluye todos los servicios necesarios para que sus clientes pasen un rato agradable y entretenido. Hay tres bares en la zona de juegos, un Sport Bar, un restaurante tipo buffet, una cafetería y un bar restaurante, todos con llamativos diseños.
Fuente: latercera
martes, 28 de abril de 2009
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