Argentina - Entre Ríos - Problemas familiares, avance de la ludopatía y pérdidas significativas de dinero en ciudadanos de clase media y baja, son las consecuencias del funcionamiento del casino Villaguay, según el diputado Darío Argain.
El legislador sostiene que en localidades no turísticas, los centros dedicados a los juegos de azar no reportan grandes beneficios, pero sí dejan su huella con trastornos económicos, sociales y de salud en la ciudadanía.
Dicen que a la hora de apertura de la sala se forma una cola, al menos, de media cuadra, integrada en su mayoría por mujeres que esperan y desesperan por jugar su dinero en alguna de las 60 máquinas tragamonedas o en la ruleta electrónica que existe en la sala.
Entidades intermedias, integrantes de la Iglesia y ciudadanos de Villaguay advierten que es notoria y preocupante la escalada de la adicción al juego fogoneada por el funcionamiento del local que depende del Iafas.
Es más, el diputado provincial por el PJ, el villaguayense Héctor Darío Argain, vocero de los alarmados vecinos, sostiene que la ludopatía ha provocado rupturas familiares y pérdidas cuantiosas entre los habituales concurrentes a la sala, que detalla, son “de clase media, media baja” y hasta en algunos casos beneficiarios del planes trabajar.
“Es una demanda que vengo teniendo de los ciudadanos y algunas entidades intermedias desde el año pasado. Es preocupante lo que está ocurriendo”, señaló Argain en diálogo con EL DIARIO y analizó que “lo que sucede en Villaguay se puede homologar a todos los lugares donde hay casinos y tragamonedas de ciudades medianas y pequeñas no turísticas”.
El legislador provincial diferencia de forma tajante la función y el beneficio de las salas de juego en localidades turísticas, donde la provincia y la ciudad en que funciona el casino obtienen un rédito significativo, con aquellas localidades medianas y pequeñas, sin actividad en el rubro, donde la ecuación de costos y beneficios, a su criterio, da un saldo completamente negativo.
“El Iafas terceriza la explotación de tragamonedas y casinos, es decir ruletas electrónicas, a cambio de un alquiler, algunos puestos de trabajo -cuatro o cinco en el caso de Villaguay- y un porcentaje que le queda al Municipio”, detalla Argain y manifiesta que “si hacés la ecuación del dinero que se va por el juego y lo que vuelve en acción social, en estos lugares no es favorable”.
Puntualmente, el diputado indicó que “en Villaguay se van 120 mil pesos por mes de gente de acá, porque no hay turismo”.
PROBLEMAS SOCIALES.
Argain sostiene que el funcionamiento del casino Villaguay “por un lado no es beneficios para la comunidad; segundo, no fomenta el turismo y tercero, corta la cadena de pago”. Además, según el legislador, “más allá de un problema económico, está generando un problema social, familiar y está el tema salud, ya que se está viendo un aumento en la adicción al juego, especialmente en mujeres”. En ese sentido, Argain graficó que “a las seis de la tarde, con el sol arriba, la gente está haciendo cola porque es la hora que abre el casino. Gente que llega con una compulsividad tremenda a jugar”.
MEDIDAS.
El año pasado en la legislatura de la provincia de Santa Fe se abrió un debate acerca de los daños ocasionados por el funcionamiento del nuevo casino en la zona portuaria. Puntualmente se originaron numerosas quejas por las reiteradas “escapadas” de empleados públicos para jugar su dinero en la sala. El problema, incluso, trascendió el sector público, ya que supermercadistas y comerciantes, aseguraban que desde la apertura del casino las ventas habían decrecido por la mañana. El pedido concreto era que la sala restrinja su horario, lo que hasta el momento no ha sucedido, ya que en Santa Fe sigue funcionando las 24 horas del día.
En Villaguay, la propuesta de Argain es directamente levantar el casino y en su lugar instalar un bingo.
“Mi propuesta puntualmente es que se analice la posibilidad de reconvertir la sala tragamonedas en un bingo familiar, que cumpliría con el mismo rol de sala de esparcimiento para la sociedad de Villaguay, pero atenuando el impacto de lo que es el sistema de tragamonedas”, indicó el diputado y argumentó que “el bingo permite que la familia comparta el juego, es menos complusivo, ya que se trata de un cartoncito de lotería”.
La iniciativa ya fue presentada al presidente del Iafas, José Omar Spinelli, quien dijo estar “absolutamente conciente de lo que estaba pasando y lo estaba analizando, más allá de que el Iafas tiene sus obligaciones contractuales, con lo cual no es fácil lo que pido”, reconoció Argain.
Fuente: eldiariodeparana
lunes, 30 de marzo de 2009
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