México - El impuesto federal mexicano sobre los bingos y otras modalidades de azar podría erigirse como la máxima preocupación de los empresarios del juego del país. Grava un 20% sobre los ingresos netos, tasa muy potente para la economía de las salas. Sin embargo, en vez de exigir rebajas, se han unido para acabar con la mayor lacra que azota al sector. Los negocios clandestinos. Aproximadamente en torno a 40.000 máquinas recreativas son operadas de forma ilegal además de contar con 300 casinos prohibidos que generan beneficios por encima de los 650 millones de dólares anuales.
Este hecho ha motivado que las firmas aztecas más potentes, TELEVISA, CIE LAS AMERICAS y GRUPO CALIENTE, se hayan unido en una asociación para luchar contra la industria irregular y conseguir un sector transparente que ofrece trabajo a 10.000 personas. TELEVISA dispone de 13 establecimientos bajo la marca paraguas PLAYCITY y 32 licencias para nuevas aperturas; CIE LAS AMERICAS contabiliza 45 salas de juego y está en posesión de 20 permisos más y el GRUPO CALIENTE presenta 88 centros recreativos.
Al parecer el Gobierno puede conceder de 40 a 45 nuevas autorizaciones pero el empresariado se muestra engañado ya que consideran quye aún están pendientes 200 adjudicaciones.
Actualemente el parque de máquinas oscila entre 25.000 y 40.000 unidades, una inversión rentable ya que los salones en poblaciones pequeñas pueden generar de forma mensual unos 250.000 dólares netos. En el escaparate comercial, las máquinas de vídeo-bingo son las estrellas.
Fuente: sectordeljuego
lunes, 28 de abril de 2008
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