Están en jaque unos 54.000 quinieleros

Paraguay - El 29 de setiembre vence la actual concesión y, debido a retrasos en la licitación, existe la posibilidad de que 54.000 de estos trabajadores se queden sin ingresos por varios meses, y el Estado sin canon, hasta que se organice el nuevo adjudicatario.
Esta es la resolución que emitió la presidenta de la Conajzar en la que decide ampliar el plazo para la compra del pliego para la licitación de la quiniela hasta el 9 de setiembre.
Se amplió el plazo para la venta del pliego de bases y condiciones de la licitación para la explotación de la quiniela hasta el 9 de setiembre.
El 11 de setiembre la Conajzar realizará la apertura de los sobres de los oferentes y a partir de allí se tiene un plazo de 10 días para definir al adjudicatario.
El actual concesionario del juego de azar, la firma Repsur, remitió una nota al ente regulador en la que informa que el 29 de setiembre, fecha en que vence su licencia, ya dejará de operar, por lo ya solicitó su liquidación.
Pese a los reiterados urgimientos presentados por algunos miembros de la Conajzar, la presidenta de la institución, Patricia Marchewka, retrasó el llamado a licitación, es decir, la licitación se hizo a destiempo.
En el caso que no exista ningún obstáculo, como protestas o reconsideraciones, amparos, etc. (cosa que es muy poco probable atendiendo quiénes compraron el pliego de bases y condiciones), la Conajzar tiene 10 días hábiles para adjudicar, o sea la resolución estaría recién para el 25 de setiembre. Por lo tanto, es imposible que antes de la fecha del vencimiento del contrato de Repsur estén firmados el decreto y el contrato con el nuevo adjudicatario.
Pero lo más grave es que si el adjudicado es otra empresa distinta a Repsur, es imposible que tenga armada la infraestructura para explotar la quiniela; por ejemplo, el actual concesionario inició sus actividades tres meses después de ser adjudicado.
No hay prórroga
Tampoco es factible una prórroga a Repsur, puesto que es ilegal y riñe con el artículo 7 de la Ley 1016, “Que establece el régimen jurídico para la explotación de los juegos de suerte o de azar”: “La concesión para la explotación de los juegos de azar de carácter nacional se realizará exclusivamente por licitación pública, por el plazo de cinco años contados desde la fecha de celebración del contrato”.
A partir de este escenario, desde el 30 de setiembre, los 54.000 quinieleros existentes en todo el país, o dejarán de trabajar o migrar a explotar la quiniela clandestina que podrá acaparar el cien por ciento del mercado.
Enojo de oferentes
La decisión de la titular de la Conajzar de ampliar el periodo de compra del pliego de bases y condiciones generó el malestar de los oferentes, quienes señalan que para adquirir el pliego tuvieron que pagar la suma de G. 10 millones y, sin embargo, hoy está disponible en la página web de la institución gratis.
También señalan que en la práctica se da una leve ventaja al actual concesionario, ya que Repsur tiene toda la infraestructura del juego de azar y como el llamado se hizo a destiempo, lo más probable es que no se quiera correr el riesgo de dejar a miles de quinieleros sin el trabajo diario.
Si bien existe un plazo de 30 días a partir de que se determine al nuevo concesionario, para poner en marcha el juego el tiempo no alcanza, entonces el Estado deja de percibir el concepto del canon en ese periodo y los levantadores de apuestas quedan colgados.
Pero, según explican quienes están en este negocio, esta situación obliga a que los quinieleros dependan de los resultados de las quinielas de Posadas o Formosa y operen de manera clandestina.
Hasta ahora son nueve las empresas o personas que han adquirido el pliego de bases y condiciones para participar de la licitación de la quiniela: Tapiracuái SA; Reinaldo Domínguez Dibb; Chena Ventures Paraguay SA; Repsur SRL; Casino Crowne; Alta Cumbre SA; Entretenimientos del Sur SA; Consorcio Gtech y Asociados y Francisco Leiva Zacarías, según los detalles.
Puja entre empresarios
Así como el presidente de la República, Fernando Lugo, reconoció que existen presiones tanto de empresarios y políticos quienes están interesados en quedarse con el negocio de la quiniela, las presiones también llegan hasta la redacción de ABC Color. La mayoría de los representantes de las empresas que pugnan por la concesión envían antecedentes acerca de denuncias, operaciones morosas, etc., sobre sus potenciales adversarios en esta licitación. Es más, precisamente la exposición de su nombre pese a su interés en este negocio hizo desistir a un empresario de medios de comunicación a continuar en el proceso, aunque no se descarta que lo haga a través de prestanombres.
Fuente: abc/ Jorge Torres Romero