Una de las más recientes discusiones incluyo a la representante Mary Bono Mack quien apoya la legislación de la industria, incluyendo juegos de poker en línea, como fuente de ingresos para el gobierno a través de la imposición de impuestos sobre dicho mercado.
Mary Bono argumenta que con la no legalización, se esta perdiendo la oportunidad de generar empleos e ingresos para el gobierno, los cuales se están generado en operaciones por fuera del país.
Así también la representante menciona que consecuencias de las adicciones a las apuestas, como la declaración de bancarrotas y la explotación y riesgo a los menores, pueden ser minimizadas con una regulación apropiada.
Sin embargo, los opositores argumentan que las posibles consecuencias negativas de dicha legalización, pueden ser irreversibles, y que los problemas que serian “minimizados” sería muy difícil controlarlos.
Tal vez el grupo que está más interesado en no permitir la legalización de las apuestas en línea, es el de las tribus indígenas del país, los cuales al mantener un monopolio de la industria de los casinos físicos, logran percibir ingresos de unos 26 billones de dólares anuales, los cuales evidentemente serian afectados negativamente al lograrse una legalización de la industria del juego en línea en Estados Unidos.
Las tribus mantienen una posición preferencial dentro del mercado desde que se publicó el acto regulatorio de apuestas de 1988 cuando se autorizo a las tribus indígenas la legalidad al participar de la industria.
Como se sabe, la regulación de las apuestas en línea en los Estados Unidos, es sola una cuestión de tiempo, por lo tanto es de esperar que las tribus mantengan ciertas reservas a una regulación que puede mermar sus ganancias actuales.
Autor: Enrique
Fuente: Tragaperras - Tragamonedas
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