Nadie apuesta en el tenis femenino ?

Argentina - La pregunta es procedente, ubicada y hasta denota un sentido legítimo de curiosidad: ¿por qué no hubo casos de apuestas ilegales en el tenis femenino? La consulta se la hicieron a María Sharapova durante su estadía en Singapur, en el mejor hotel posible, con bandejas llenas de chocolate que su padre le prohibía comer y mientras jugaba una exhibición con Anna Chakvetadze. Sharapova, ícono del tenis femenino de estos tiempos y nunca esquiva para responder hasta lo que la incomoda, se alegró porque las mujeres no han padecido ese problema y porque la WTA hace todo para que el tenis femenino permanezca limpio.

Martina Navratilova, en simultáneo, advirtió sobre la posibilidad de la existencia de "partidos amañados" y confesó que es muy difícil comprobar si un tenista va a menos, entre otras cuestiones, porque el arte de la simulación puede llegar a tener buenos practicantes. En privado, algunos deportistas profesionales, del tenis y de otros deportes, suelen hacer alarde sobre lo complicado que es para un espectador medio adivinar si un deportista da todo lo que tiene o no. Por eso, Navratilova entiende como nadie de que la va el asunto.

El tenis masculino tiene a las apuestas como un foco infeccioso al que intenta aislar y procurar que no contagie. Sin embargo, el tenis femenino se mantiene inmune aunque las casas de apuestas online ofrecen y trabajan sobre las dos versiones deportivas con igual intensidad. El circuito masculino ha llegado a una suerte de militarización tecnológica para evitar las apuestas ilegales y las ilegítimas. Las ilegales son las quese basan en resultados arreglados. Las ilegítimas comprenden a aquellos que no pueden usar información del circuito, simplemente, porque forman parte de él. Los códigos de conducta del deporte profesional son la letra chica que muchos deportistas ni siquiera advierten que existe. Tener un abogado a mano es hoy tan importante como el entrenador, el médico, el psicólogo, el preparador físico y el laboratorista. Justo o injusto, el asunto, sin embargo, solamente ha salpicado a los hombres.

Si el "tsunami" de las apuestas deportivas fue cultivado en internet, que mejor que recorrer los sitios de apuestas y los blogs creados por aficionados que han hecho del tenis, una nueva ciencia de estudio para seguir comportamientos, actitudes y finalmente, actuaciones, que mejorará la economía de los apostadores deportivos de poca monta. En un sitio que brinda información sobre la marcha del tenis para que la usen los apostadores, se presenta al tenis femenino como un complemento del tenis. Es decir, un agregado, apenas una variante. Las distintas maneras de jugar dinero incluyen las apuestas a futuro: anticipar como le irá a los tenistas en los cuatro Grand Slam, con la adrenalina a punto de caramelo con el Australian Open. Ese modo de apuestas es un matiz en la rutina diaria de los apostadores basada en jugarle plata a los partidos del mismo día y en algunos casos, a los que ya comenzaron.El tenis de Sharapova, Henin, Jankovic y las Williams, aunque también cotiza minuto a minuto, suele ser tomado como accesorio.

Otros blogs, sin embargo, aconsejan entregarse con dedicación al susurro de las mujeres tenistas ya que la posibilidad de las sorpresas es mayor. Cuando el resultado inesperado se da, la ganancia es suculenta. Por eso sugieren aprender de tenis, saber que en el tenis femenino el servicio no es un arma letal como en el masculino, y que una laguna mental puede dejar afuera a una favorita y ahí estaba el apostador arriesgado, donde otros no vieron ni intuyeron.

Los blogs de los apostadores que confían datos pueden ser reales o no. Imposible saberlo. Las casas de apuestas pueden incentivar el juego con la confiabilidad que dan hoy en internet los recursos amateurs y caseros. Lo que es incontrastable es que el tenis femenino, por ahora y por suerte, no parece infestado por mafiosos que invitan a perder. Lejos del estereotipo de las viejas películas, los hombres del juego clandestino ahora lucen limpios y perfumados y no se ocultan bajo sombreros, gafas y sobretodos oscuros.

De todos modos, el problema del tenis masculino es su virtud. Es apetecible para los apostadores, sencillamente, porque se presenta competitivo a diario. Con margen para la sorpresa y para la certeza. Tiene buenos deportistas y su interés transcurre a toda hora, en varias partes del mundo. Ningún deporte individual agita tanto el avispero como el tenis de lunes a domingo.
¿Apostaríamos a mano de Federer si juega contra Nalbandian? ¿ Alguien puede asegurar qué un tapado no deje afuera de un Grand Slam a un top-50 en la primera ronda? . El tenis masculino tiene su lógica, pero no brinda respuestas faciles a esas preguntas. Por eso su dinámica es rendidora para las apuestas.

Lo que deberíamos hacer es averiguar cuantas preguntas como éstas soporta el tenis femenino para entender ,porque hasta ahora, ningún caso de apuestas ilegales, ha manchado pollera alguna.

Fuente: Marcelo Gantman - lanacion.com.ar