Necesario vigilar juegos y sorteos para evitar al crimen organizado

México - El presidente de la Asociación de Permisionarios de Juegos y Sorteos, Alfonso Pérez Lizaur, destacó la necesidad de crear mecanismos de vigilancia y fiscalización de las empresas del ramo, para evitar la participación del crimen organizado en la actividad.
Al reunirse con la Subcomisión de Juegos y Sorteos de la Cámara de Diputados, Pérez Lizaur comentó que el sector presenta problemas producto de la ilegalidad, por lo que “de no regularse de manera adecuada con certeza para clientes y empresarios, la clandestinidad seguirá creciendo”.
Resaltó que ese sector reporta beneficios económicos por mil millones de dólares en inversión y crea más de 35 mil empleos, al tiempo que señaló que “con los permisionarios autorizados es suficiente para prestar el servicio”.
En su oportunidad, el representante en México del Instituto Interamericano de Derechos sobre Juegos de Azar y Apuestas, José Luis Benavides, dio a conocer que existen en México cerca de 60 mil terminales electrónicas ilegales para juegos de azar.
Consideró que la nueva regulación debe regirse bajo los principios de transparencia y certeza jurídica, por lo que se requiere un órgano regulador eficiente y especializado, pues “la Dirección General Adjunta de la Secretaría de Gobernación sólo administra permisos y solicitudes”.
El juego en México, destacó, es una realidad que tiene que cumplir con una función de utilidad social para convertirse en detonante económico, pero el sector ha transitado entre la prohibición por cuestiones políticas y “la simulación, que es donde nos encontramos con el reglamento de 2004”.
A su vez, el diputado Francisco Javier Gudiño manifestó que las reformas a la Ley Federal de Juegos y Sorteos deben plantear mecanismos para que los recursos obtenidos por esta actividad se dirijan a las zonas marginadas.
A su vez, los diputados Gilberto Ojeda Camacho y Martha Angélica Romo se pronunciaron a favor de incorporar disposiciones para que el juego sea exclusivamente para adultos, además de considerar programas de prevención de la ludopatía.
Fuente: senderodelpeje