Advierten que el auge del cuerpo como consumo despierta el sadismo sexual

Argentina - Posadas, Misiones. Profesionales revelan que el hombre vive en conflicto con la sexualidad, pero el peligro aparece cuando se rompen las normas morales. La Policía admite que hay más ataques, pero que también la gente ya se anima a denunciar.
Durante la semana pasada una madre adolescente y su pequeña beba de 18 meses fueron brutalmente violadas por varios hombres tras beber en cantidad y en un motel fueron detenidos dos mayores de edad con cuatro niñas menores de 15 años, luego de cenar en un restaurante de la ciudad, poniendo en alarma a la sociedad de la capital misionera por los reiterados casos de perversión que se conocen cada vez con más frecuencia.
Tanto desde la Policía, como profesionales en psicología, advierten que los casos de delitos sexuales con saña o mayor perversión, responden al fenómeno de la gran oferta sexual en los medios de comunicación y al fortalecimiento del consumo del cuerpo, distorsionando de esa manera el conflicto que el ser humano tiene con la sexualidad desde principios del mundo.
El psicólogo Raúl Gallardo fue contundente al asegurar que “no hay que olvidar que la pornografía es el tercer negocio en el mundo y si bien el ser humano siempre estuvo en conflicto con la sexualidad, lo peligroso es cuando se pasan las normas morales”.
El consumo mediático del sexo, las fotografías y videos por Internet, las ofertas por televisión, el juego con los cuerpos de chicas cada vez más precoces, potencia y desarrolla más la actividad sexual, generando en personas con diversos desórdenes sociales y culturales, un cóctel que al parecer es imposible de contener cuando las oportunidades se presentan de alguna forma facilitadora.
“Yo estoy convencido que la difusión de lo prohibido, de distintas situaciones que antes eran un tabú y el consumo de distintas adicciones son lo que hacen que cada vez se hable de más casos como estos”, dijo el jefe de la Policía Comunitaria, Walter Milogis.
Para Milogis, el hecho de que se conozcan más casos, se debe a que, además de que se sucedan más situaciones con altos grados de perversión, “la gente ahora se anima a denunciar, perdió el miedo a hablar sobre estos temas”.
La referencia es especialmente a la intervención policial en un motel cercano al centro de Posadas, en donde fueron descubiertos in fraganti dos hombres de entre 32 y 35 años con dos chicas menores de 15 cada uno en sus respectivas habitaciones alquiladas minutos antes.
Si bien la investigación policial determinará lo que realmente sucedió previamente entre los seis protagonistas de esa increíble historia del bajo mundo, es otro claro ejemplo de lo que también advirtió el psicólogo Raúl Gallardo, ahora voluntario de la Cruz Roja en el programa de VIH Sida.
“Si uno investiga, seguro que las adolescentes son las que más trabajan en la avenida Uruguay”, dijo en relación a la preferencia en aumento de los hombres por tener relaciones sexuales con chicas cada vez de menores edades, respondiendo a una tendencia que lamentablemente tiene más lugar entre las ofertas o apetencias sexuales en esta parte del mundo.
Como postre de la noche
Los casos coinciden en que los deseos sexuales se impulsan mientras los futuros sádicos se alimentan y beben hasta el hartazgo. Entonces se presenta la necesidad de desarrollo personal y hasta de tener el poder, que según Gallardo, va variando en los últimos años.
Los hombres de 32 y 35 años estaban cenando en un restaurante y poco antes de la media noche decidieron completar sus deseos con un postre poco habitual. Conocieron, y al parecer, empezaron a coquetear con cuatro niñas, de entre 12 y 14 años. Al parecer por el aviso de una persona que estaba viendo la situación poco normal, la Policía llegó al sitio en pleno microcentro y justo se estaba concretando el inicio del viaje. Tres subieron a un remís y los otros hicieron lo mismo pocos minutos después.
El viaje terminó dentro de un motel y allí la Policía intervino con ayuda del propietario del albergue transitorio. Dentro de las habitaciones alquiladas estaban, efectivamente, las cuatro pequeñas con los dos empleados, según dijo la Policía, del Instituto de Previsión Social.
Desde la Justicia se supo que se realizará un estudio socio ambiental en las viviendas de estas niñas, para determinar cómo se constituye el núcleo familiar y en qué situación se fueron desarrollando para comprender qué les está ocurriendo para involucrarse en situaciones como estas que bien pudieron terminar de la peor forma.
“Muchas veces las víctimas llegan a estos extremos para conformar un pedido de ayuda”, dijo Gallardo, que explicó que también ocurre de esa forma con los victimarios, que en muchos de los casos se comportan así por haber sido víctimas años atrás y en circunstancias parecidas, aunque aclaró “que eso no es lineal, no siempre es por la misma causa”. Es decir, tiene mucho que ver el grado de estimulación en cada persona y el nivel de conciencia para determinar qué es lo malo y qué es lo bueno.
“Son raíces culturales y habría que ver si el cuerpo social está preparado para lidiar con estas circunstancias...”, advirtió el psicólogo.
El comisario Milogis insiste en que no hay un temor entre las mujeres por ser víctimas de una violación, aunque destacó que en las charlas de prevención que se concretan en distintos barrios, siempre se aconseja andar en grupos y dejar dicho adónde se dirigirán a amigos o conocidos.
En relación al caso más brutal, el de la violación a la madre de 21 años y al de su pequeña beba de sólo año y medio, Milogis resalta, como lo había anticipado, que mucho tienen que ver las adicciones a las bebidas alcohólicas y a las drogas.
Y en ese sentido, crece la teoría del comisario, según lo escrito por el bioquímico Ricardo Sánchez Recio en un diario sanjuanino, de las diferentes adicciones en la sociedad como a las drogas, al alcohol, al juego y las apuestas (ludopatía), al consumo y lujo, y otras, la que más crece es la adicción al sexo. De esa manera ya existen grupos de ayuda llamados sexólicos anónimos, que tratan de liberar al adicto.
Pero de la misma forma que los hombres quisieron tener su postre con las niñas, posiblemente el caso ocurrido en el barrio Kennedy, tenga algo de similitud.
La chica de 21 años habría decidido tomar algunos tragos con varios hombres, de quienes sospecha la Policía podrían ser conocidos de ella.
En un determinado momento la futura víctima habría perdido el conocimiento y allí se inicio el acto perverso de quienes aún no se sabe a ciencia cierta cuántos eran.
La violación, la sed de saciar sus oscuros deseos se concretó de manera salvaje. Ya tomados, los salvajes utilizaron elementos contundentes y no se descarta, según la investigación, que haya sido una botella.
En el hospital se confirmó que la chica presentaba un desgarro en la zona vaginal y aún más terror sacudió a los médicos, cuando constaron que la beba también había sido penetrada y según las primeras informaciones determinaron que los violadores pudieron haberlo hecho con sus propias manos.
¿Qué se esconde detrás de estos siniestros hombres?
“Históricamente el hombre ha sido perverso, en la antigua Roma, tras las increíbles comilonas, se desarrollaban orgías de todo tipo.... ahora, quienes están fuera de un ambiente familiar, en donde todo se desarrolla de manera civilizada, caen en las tentaciones y se cometen estos hechos... es algo que el hombre lleva desde siempre”, agregó Gallardo.
El doctor Sánchez Recio es determinante: aparece la pornografía cada vez más intensa y violenta acompañada de toda clase de perversiones sexuales. Se demostró que el consumo de pornografía predispone a las personas a la comisión de delitos sexuales, haciendo al varón más agresivo respecto de la mujer.
Casi un 80 por ciento hacia mujeres
Según un informe del Senado y la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, para su proyecto de Ley sobre la creación de la Dirección Provincial de Antecedentes Personales, son numerosas las opiniones profesionales que indican que hay una alta posibilidad de que aquellos que cometen delitos sexuales contra menores de edad se conviertan en reincidentes.
Las estadísticas indican que el 16 por ciento de los argentinos han sido víctimas de algún tipo de abuso sexual infantil, estimándose la edad promedio del abuso en los 11 años de edad y recayendo estos abusos mayoritariamente sobre las niñas un (78%) siendo el restante 22% causado sobre varones.
Bajos instintos y grandes millones
Los niños y adolescentes son expuestos en estos días a la pornografía a través de la TV e Internet, revistas y películas. En la web este flagelo representa el tercer negocio más lucrativo de la red generando ganancias de 3.000 millones de dólares por año. Se registran cerca de 100 millones de visitas mensuales a las cinco principales páginas porno gratuitas. Existen más de 100 mil sitios pornográficos en la web, y diariamente se introducen 200 sitios nuevos.
Fuente: territoriodigital